Investigadores alemanes han descubierto que una tecnología
de los 80 puede ser empleada por hackers para espiar llamadas y mensajes de
texto. Su nombre es Signaling System 7 (SS7), una red que a día de hoy sigue en
uso y que enlaza tráfico (entre otras funciones) en la red de telefonía móvil.
Signaling System 7 utiliza una serie de protocolos para
enrutar llamadas, mensajes de texto y servicios similares en las redes móviles.
Sin embargo los investigadores Tobias Engel, de Sternaute, y Karsten Nohl, jefe
científico de los laboratorios de investigación en seguridad, han descubierto
algunos fallos en la red.
Ni siquiera las redes móviles que utilizan las más avanzadas
técnicas de cifrado se libran de los fallos descubiertos, ya que estas tienen
que comunicarse a través de SS7, posibilitando a los hackers localizar
llamadas, escucharlas o grabar conversaciones cifradas para usarlas más tarde.
A principios de este año se informó de una serie de países
que habían comprado sistemas de vigilancia que usan la red SS7, esto podría ser
un indicio de que el fallo de seguridad se conoce desde hace tiempo.
El paso a las redes 3G ofrece cifrado mucho mejor, pero las
técnicas de hacking reveladas Nohl y Engel socavan esa posibilidad. Los Carriers
pueden potencialmente vigilar sus redes para dificultar los esfuerzos de los
atacantes, pero no está claro cuántos lo han hecho y sin duda esto posibilita
el espionaje por organismos estatales. Por ejemplo red que opera en Alemania,
Vodafone, recientemente comenzó a bloquear dichas solicitudes maliciosas
después que que Nohl informara el problema a la compañía hace dos semanas.
Hay dos métodos principales que se utilizan para interceptar
llamadas telefónicas a través de SS7. En la primera los atacantes secuestran la
función de reenvío del teléfono, redireccionando las llamadas hacia ellos antes
de enviarlas al verdadero destinatario. Esto permite a los hackers escuchar las
llamadas desde cualquier parte del mundo.
El segundo método consiste en utilizar antenas de radio para
recoger todas las llamadas y mensajes de texto de una zona. Los hackers pueden
incluso solicitar una clave de cifrado temporal a través de la red SS7, en caso
de tener la información transmitida alguna seguridad adicional. Esta técnica
tiene el inconveniente de que se necesita estar más cerca de las víctimas, pero
lo compensa con su capacidad de afectar a muchas más personas a la vez.
Los investigadores alemanes mostrarán sus descubrimientos en
el Chaos
Communication Congress de Hamburgo que comezó el 27 de diciembre pasado,
curiosamente el mismo donde Trammel Hundson explicará la vulnerabilidad de los MacBooks a través del puerto Thunderbolt
y que puede verse en live
stream.
Fuente: Betanews